martes, 28 de enero de 2014

Locas. Mujeres que rompían el imaginario femenino


En el último número de la Revista Electrónica de Psicología Iztacala en el pasado mes de diciembre encontramos el artículo "El ideal femenino y la educación emocional a principios del siglo XX" escrito por Janete A. Carrizo, Judith I. Gutiérrez y Olivia Tapia Jiménez dentro del monográfico Cuerpo, salud, género y emociones.
 Las autoras estudian de qué manera las mujeres recluidas en el Manicomio General de "La Castañeda" en México a principios del siglo XX rompían con las representaciones sobre la feminidad. Unas representaciones construidas a través de dispositivos emocionales de la época, tal es el caso de el texto de Madam H. Loved sobre la educación femenina en las aulas.
Las mujeres eran catalogadas como "locas" cuando presentaban una vida sexual no ajustada a los estrechos márgenes de contención y "pudor" de la época. Al mismo tiempo, una vehemencia emocional, concretada en expresiones consideradas excedidas de ira pero también de amor, eran rasgos que la psiquiatría del momento consideraba patológicos para las mujeres. Incluso, el uso de la fantasía para crear historias, orales o escritas, era considerado un rasgo digno de vigilancia y control.
En contraste, la feminidad de la época era perfilada a través de los dispositivos emocionales con rasgos como el control emocional, la autodonación y consagración en favor de la felicidad del marido y los hijos(as),  y la "pureza" entendida de manera físico-sexual y también moral. 
Por tanto, el ámbito de la sexualidad, de las emociones y del  mayor o menor espacio propio -físico pero también subjetivo- son ejes sobre los que se articula la normalidad/anormalidad de las mujeres, y por tanto los límites de la locura, en el contexto y lugar estudiados.